Después de Ströeder nos encontramos con gran cantidad de agua acumulada en forma de lagunas y charcos.
Esto trae una nueva esperanza a toda la gente de aquellos lugares. Los campos verdean por los cardos rusos, resistentes y empecinados, un alimento bueno para los animales, aunque un problema para los alambrados cuando se sueltan y comienzan a rodar.
Gracias a Dios la lluvia ha comenzado a caer. Pero todavía falta. La arena sigue volando, los campos siguen desiertos, y lo que es más triste, hay muy pocos animales que puedan aprovechar el pasto, ya que los productores los han malvendido, si lo alcanzaron a hacer, a muchos se les han muerto.
Gracias a Dios la lluvia ha comenzado a caer. Pero todavía falta. La arena sigue volando, los campos siguen desiertos, y lo que es más triste, hay muy pocos animales que puedan aprovechar el pasto, ya que los productores los han malvendido, si lo alcanzaron a hacer, a muchos se les han muerto.
Sí, todavía necesitamos que Dios nos dé mucha paciencia y fuerzas para seguir luchando. Él nos ha dado una señal: la lluvia, y eso es una gran alegría para todos.
Dios quiera que este año sea más benévolo para todos, como dijo una señora en el culto. ¡Que Dios los bendiga!
Dios quiera que este año sea más benévolo para todos, como dijo una señora en el culto. ¡Que Dios los bendiga!
Estela Andersen
No hay comentarios:
Publicar un comentario