Durante cinco días, del 6 al 11 de Febrero, los y las jóvenes del Distrito Sur de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata tuvieron su Campamento de Verano en las instalaciones de la Iglesia Reformada de Claromecó, bajo el lema "Buscando sostener la armonía de la Creación".
Primer día:
En la tarde del lunes fueron llegando los y las jóvenes de Mar del Plata, Tres Arroyos y Trenque Lauquen (de la Congregación Evangélica Semillas del Sur). Algunos/as llegaron más temprano y pudieron disfrutar de la playa, si bien la convocatoria era de tardecita.
Lo primero que hicieron fue armar las carpas y acomodarse.
Luego comenzamos a preparar la cena, que fue muy fácil, porque sólo hubo que calentar tartas elaboradas por las mamás de los/as jóvenes de Tres Arroyos.
Al terminar la cena, Geraldina realizó el devocional de inicio del campamento, llamando a ser LUZ.Los/as jóvenes que todavía no estaban tan cansados jugaron a "La viudita".
Segundo día:
Comenzamos el día con el desayuno,
y luego, la pastora Annedore guió el devocional.Luego pautamos los horarios de las comidas, de silencio y de descanso.
Se armaron los grupos de trabajo con el cronograma de tareas rotativas para todo el campamento:
- limpieza de baños
- limpieza del predio
- elaboración de comidas y limpieza de cacharros
- elaboración y celebración de los devocionales matinales y vespertinos con ayuda de uno/a de los/as pastores.
fuimos a la playa, algunos/as hasta las 12 hs., mientras que el grupo de cocina se fue antes.
Una vez listo el almuerzo, comimos después de agradecer los alimentos,y luego, utilizando el sistema del año pasado (palangana de agua caliente jabonosa, palangana con agua para enjuagar y repasadores para secar), cada uno/a lavaba sus cosas. Quienes iban terminando ayudaban al grupo de cocina a limpiar si es que no tenían otra tarea.
Después de una breve pausa, trabajamos el primer tema "La armonía de la Creación". El taller del primer día estaba a cargo de la pastora Estela Andersen.
Recordamos el relato de la Creación que fue tema del devocional de la mañana y lo realcionamos con el conocimiento adquirido en las escuelas.
Hubo dos momento de trabajo en grupo. El primero, con el análisis de distintos Salmos sobre la creación de Dios y su perfección. La tarea era buscar los detalles del texto: montes, árboles, fenómenos naturales, etc. y reflexionar acerca del lugar de los seres humanos según los textos.
El segundo momento en grupos tuvo el desafío de descubrir nuevamente en Salmos y en Isaías los fenómenos naturales y climáticos, y su origen, también ver si algo de eso tenía que ver con la conducta humana.
Al cierre de cada bloque, los grupos compartían lo trabajado en los grupos en plenario.
El día estaba hermoso, por lo que organizamos la merienda y fuimos a pasar la tarde en la playa.
Allí se tomó mate, se comió torta casera, mucho baño en el mar y caminatas por la playa.
A eso de las 19.30 hs. regresamos al campamento para el baño
y la elaboración de la cena: pizzas!
El devocional de la noche fue el primero preparado por un grupo. Tuvieron la buena idea de juntar en una caja todos los celulares.
La propuesta fue ¿cómo preparar nuestro devocional diario? Algo muy importante para mantener la fe viva, un ejercicio tan importante como el del cuerpo.
Tercer día:
El tercer día amaneció bastante nublado y fresco. El desayuno fue temprano y rápido porque había un plan:visitar una granja ecológica en San Francisco de Belloc.
Nos recibieron a la entrada del pueblo y nos hicieron poner en ronda, primeramente parados y luego acostados. La finalidad era conectarnos con la naturaleza.
El tema presentado: la "permacultura", que tiene que ver con el cuidado del planeta a la hora de producir.
Luego fuimos caminando hacia la granja cada uno/a con una hoja en donde había que anotar y/o dibujar: árboles, aves o bichos, según el grupo de pertenencia.
Al llegar a la granja nos mostraron algunos árboles frutales y luego nos invitaron a formar grupos de tres personas, a hacer un recuadro con un hilo en el suelo y observar la vida en ese espacio reducido.
Luego nos despedimos nuevamente en ronda y nos sacamos una foto grupal.
En Claromecó el diácono Detlef ya estaba comenzando a asar los pollos a la parrilla, por lo que el grupo de cocina rápidamente se puso a trabajar con las ensaladas.
Comimos con alegría, ya que el frío nos había abierto el apetito.Apenas terminamos de comer y limpiar, se largó la lluvia, que duró toda la tarde, parando en algunos momentos.
Esto significó quedarse en el campamento, pero también que algunos/as tuvieran que dormir en el templo porque sus cosas se habían mojado... y la lluvia siguió hasta la noche.
Pero no había problemas, porque el pastor Leonardo tenía un material muy interesante para trabajar: "Como el ser humano 'desarmonizó' la creación de Dios".
Como inicio armó una dinámica muy divertida para formar tres grupos iguales.
Luego presentó el tema a partir del relato de la desobediencia o caída.
Y trabajaron en grupos, primero con el texto bíblico,
y luego con una reflexión del teólogo Leonardo Boff.
El énfasis estuvo sobre todo en el gran problema que genera el sistema socio-económico capitalista neo-liberal de los recursos/riqueza mal distribuida: muchos muy pobres y pocos muy ricos y poderosos.
Después de la merienda los/as jóvenes decidieron jugar a los lobizones (cosa que ya habían hecho la noche anterior).
La cena fue de lujo: tortillas de harina de trigo con rellenos variados.
Siempre se dice que "al mal tiempo buena cara" y esa fue la actitud.
El devocional de la noche estuvo en la misma línea que el trabajo de la tarde.
Presentando cómo el ser humano es responsable de la "desarmonización" que está sufriendo la creación,
y que está en nosotros generar los cambios.
Nuevamente, y esta vez con más tiempo, jugamos a los lobizones, guiados/as por la pastora Annedore.
Cuarto día:
Después del desayuno, compartimos el devocional matinal.El sol había salido, por lo que aprovechamos a sacar colchones, bolsas de dormir y demás para que se sequen y cada uno/a pueda regresar a su carpa por la noche.
Melisa había traido algunos juegos para jugar en la playa, por lo que aprovechamos que el día estaba más o menos para divertirnos un rato.
Al regresar, el grupo de cocina se ocupó de preparar el almuerzo: restorán (o sea los restos de comida que sobraron los días anteriores)
y milanesa!!!
Después de pequeño descanso, la pastora Annedore y Martín presentaron el tercer tema: "Estamos a tiempo", en base a lo trabajado los días anteriores.
Propusieron trabajar en cuatro grupos.
Primeramente qué buenos hábitos tieneny cuáles desean cambiar para el cuidado del planeta.
En un segundo momento debían pensar en algo para cuidar el planeta,
algún tipo de proyecto, y presentarlo.
En un tercer momento, entre todos/as debían elegir uno de los proyectos, formar dos grupos: uno a favor y otro en contra,
y realizar un debate con argumentos medianamente sólidos.
Los/as pastores Annedore, Leonardo y Estela eran el panel de evaluación y aceptación, mientras que Martín era el moderador. El proyecto elegido fue el de "Viajes compartidos".
Hacía calor y el sol brillaba, por lo que preparamos la merienda y fuimos a la playa. Un grupo grande entró corriendo al mar... un poco exagerados ¿no?
Una vez que salieron de agua y habían gastado energías, compartimos la merienda, esta vez: galletitas, que repartimos en 'manojos', como si fuera una ofrenda o ración.
La cena: ¡un lujo! empanadas de caprese, de jamón y queso y de carne, que fueron devoradas hasta las migas... es que la playa abre el apetito.
El devocional de la noche siguió con la temática de la tarde.
Luego dos grupos hicieron unos sketch clásicos: "La viborita"
y "La familia de sordos".
No podía faltar, como cierre de la noche el juego de los lobizones... y a la camita.
Quinto día:
Después del desayuno, Lucía guió a un grupo con el devocional matutino.Nuevamente reflexionamos acerca de nuestras acciones concretas a favor del cuidado del planeta. Como gesto cada uno/a colocó una cita en el símbolo que habían armado en el piso con telas y tierra.
A pesar de que estaba un poco fresco, fuimos a la playa.
Ahí surgió la idea de escribir un guión para un video incorporando todo lo trabajado en los días del campamento.
Volvimos de la playa, almorzamos, limpiamos, descansamos, y
luego trabajamos con la visita que recibimos del Servicio Evangélico de Diaconía (SEDI): Vanesa Acosta.
Vanesa vino a contar lo que es el SEDI y a ofrecer sus talleres (para que tuvieran alguna idea de qué se trata, dio, en forma resumida, un taller sobre discriminación y estigmatización).A través de la dinámica "¿Quien soy?", pudieron hablar de estereotipos y maltrato. Estuvo muy bueno, y seguramente en poco tiempo volveremos a trabajar juntos.
Ya de mañana habían adelantado algún material para el video,
y ahora tocaban más escenas de la playa.
Una merienda rápida y más escenas: en la ducha,
y en la ducha.
Faltaban algunas escenas de exteriores y nos corría el sol, así que hicimos una en el auto de la Congregación Semillas del Sur,
y otra justo afuera del templo de la Iglesia Reformada, en donde estábamos acampando.
Finalmente, en el templo, se filmó la última parte.
Llevamos el guión y las filmaciones en crudo y las editamos en Bahía Blanca, con este resultado:
"Noticampa", el noticiero del verano
Mientras que algunos jóvenes trabajaban en el video, por turno fueron pintando la bandera del campamento.Un día con mucho movimiento y producción... ¡pero lo logramos!
En medio de tantas actividades igual hubo tiempo para hacer algunas artesanías, varios jóvenes tejieron "atrapasueños".
Y la mesa de pin pon estuvo al rojo vivo en cada momento de descanso... y... cada uno/a descansa como quiere ¿no?
Era la última noche, y había que hacer una buena despedida, por lo que la cena fue: ¡hamburguesas!!
El devocional vespertino tuvo como centro la bandera realizada por los/as jóvenes,
y se centró nuevamente en la temática del campamento.
Como los/as chicos/as se habían portado tan bien, quisimos darles una sorpresa: ¡helado! servido por las manos de Lucía, Geraldina y Estela.
Como despedida no podía ser de otra manera que con el juego de los lobizones ¡hasta las 2 de la mañana!!... pero fue bueno.
Sexto día:
Y todo tiene un fin... es así, así el sábado, después del desayuno, juntamos las cosas (al menos en parte).Compartimos el devocional de despedida
encendiendo las luces que deseamos ser para el mundo,
para mejorar nuestro planeta y lo cuidemos como Dios espera.
Y así llegamos al momento de la despedida, siempre eso es un poco difícil, pero a la vez con hermosos momentos compartidos y afianzando nuestros lazos, que es tan importante.
El grupo:
Atrás: Walter, Estela, Karen, Alejandro, Benjamín, Melina, Jerónimo, Diego, Benjamín, Alexia, Annedore, Martín, Leonardo, Marian, Abigail, Priscila, Carolina y Sara.
Adelante: Christian, Rocio, Marcos, Agustín, Geraldina, Maitén, Lucía y Jonás.
Muchas gracias a todos/as los/as jóvenes que participaron, a sus papis, a la comunidad de Claromecó y a toda la gente que hizo posible que este campamento se realizara. ¡Que Dios les bendiga!
Nos vemos en el campa de invierno, en Bahía Blanca.
Estela Andersen