Bahía Blanca |
Este año el tema fue "El aliento de vida de Dios: Protegiendo el obsequio sagrado del Aire".
Las ofrendas de todos lo cultos fue destinada a nuestra Casa de Huéspedes en Bahía Blanca.
Carmen de Patagones |
El 25 de Mayo, en Carmen de Patagones, congregando las comunidades del sur: Ströeder y Villalonga.
El 1 de Junio, en Bahía Blanca, en donde la fiesta se está programando para el 29 de Junio por la ausencia en la fecha estipulada de personas fundamentales para la organización del evento.
El 8 de Junio, en Suárez, en donde también se celebró ese día el Domingo de Pentecostés.
Suárez |
Alpachiri |
En cada una de las comunidades reflexionamos a partir de símbolos concretos esto de formar parte de la comunidad cristiana, del cuerpo de Cristo.
En Alpachiri, a través de un pequeño muro, reflexionamos acerca de ser "piedras vivas".
Carmen de Patagones |
En Patagones, reflexionamos acerca de la importancia de la salvación "por el agua" al igual que Noé, pero esta vez, las aguas del Bautismo.
Suárez |
En Suárez, a través del armado de un rompecabezas, vimos la importancia de cada miembro como único e imprescindible para estar "completos" y armónicos.
Bahía Blanca |
Alpachiri |
Carmen de Patagones |
“Cuando ya iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa, pero los discípulos no sabían que era Jesús. Y les dijo:
—Hijitos, ¿tienen algo de comer?
Le respondieron:
—¡No!
Él les dijo:
—Echen la red a la derecha de la barca y hallarán.
Alpachiri |
Entonces la echaron, y ya no la
podían sacar, por la gran cantidad de peces. Entonces aquel discípulo a quien
Jesús amaba dijo a Pedro:
—¡Es el Señor!
Simón Pedro, cuando oyó que era el
Señor, se ciñó la ropa (porque se había despojado de ella) y se tiró al mar. Los otros discípulos fueron con la
barca, arrastrando la red llena de peces, pues no distaban de tierra sino como
doscientos codos.
Al descender a tierra, vieron brasas
puestas y un pescado encima de ellas, y pan. Jesús les dijo:
—Traigan de los peces que acaban de
sacar.
Subió Simón Pedro y sacó la red a
tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos,
la red no se rompió.”
Suárez |
Señor, aquí nos encontramos tus sorprendidos hijos y tus asombradas hijas. Oímos y vemos como en la noche en que fuiste traicionado, tomaste el pan.
Diste gracias a Dios, partiste el pan y se lo repartiste a tus discípulos con las palabras: Tomen, coman esto es mi cuerpo que por ustedes es dado. Hagan esto en memoria de mí.
Oímos y vemos como tomaste la copa.
Diste gracias a Dios y se la entregaste a tus discípulos con las palabras: Beban de ella todos, esta copa es la nueva alianza en mi sangre, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.
Hagan esto todas las veces que la beban, en memoria de mí.
Bahía Blanca |
Señor, seguirte a vos y tener parte en tus milagros van juntos de la mano.
Esto lo podemos ver y experimentar aquí, al celebrar tu presencia en esta tu mesa: El fuego está encendido. Tenemos pan y vino.
Y vos mismo, Señor, estás aquí presente, como el pez sobre las brazas, sacrificado por la vida y la salvación del pecador.
Vos mismo tomás pan y vino. Vos nos lo das a comer y a beber.
Bahía Blanca |
Después de la celebración eucarística, agradecidos por la Palabra y el alimento agradecimos a Dios de esta manera:
Señor, te agradecemos por tus dones. Te agradecemos que estás cerca de nosotros. Te agradecemos que sos vos mismo, el que viene a nosotrxs. Gracias a que abrís las profundidades del mar y permitís el milagro de la pesca, el milagro de un cambio inesperado, el milagro de un sorprendente éxito, el milagro donde trabajo y amor no son en vano. Amén.
Envianos, Espíritu de Dios.
Confiamos en Dios, quien nos llama a ser la Iglesia para amar y para salvar a toda la creación para servir a la justicia y para resistir el mal para proclamar a Cristo, nuestro Juez y nuestra Esperanza.
Envianos, Brisa de Dios.
Suárez |
Y la bendición y envío:
Que la buena salud y la felicidad te acompañen.
Que sientas agrado en lo que tengas que hacer,
Orgullo por todo lo que has hecho,
Confianza en todo lo que harás
Que tengas paciencia cuando vengan tiempos difíciles
Y fe en que los años que vendrán serán mejores
La bendición de tener amigos con quienes compartir
Optimismo y alegría animándote el corazón
Y seguridad en que Dios va contigo en el camino.
Que Dios, para quien la noche es tan clara como el día,
guíe tus pasos en el camino.
Que Dios, quien está contigo cuando te paras y cuando te sientas,
Te rodee con su amor y te sostenga de la mano.
Que Dios, quien conoce tu camino y tus lugares de descanso
Esté contigo cuando esperas.
Sea tus buenas noticias para compartir,
y te guíe en el camino que es eterno. Amén.
Realmente si nos ponemos a pensar lo mucho que Dios nos da, cómo ha preparado toda la tierra para que la aprovechemos y la cuidemos como algo simple y armonioso, no podemos más que dar gracias infinitamente.
Dios quiera que el tomar conciencia de tantos dones nos haga también asumir el compromiso tan necesario que como cristianos somos llamados y que tantas veces nos resistimos.
¡Que Dios nos bendiga ahora y siempre!
Estela Andersen
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