viernes, 2 de octubre de 2015

Mujeres con fe cambiando las cosas, caminos de ayer que hoy nos convocan...

Argula von Grumbach (1492-1554) 

Argula von Grumbach fue una mujer valiente que alzó su voz y su pluma para defender la Reforma desde sus inicios. Argula tomó parte en los debates teológicos de la época, desarrollando una ardiente labor apologética a favor de las doctrinas bíblicas y en defensa de Lutero, Melanchton y otros reformadores. Se dice que fue la primera escritora protestante, y una de las pocas mujeres de su tiempo cuyos  poemas, cartas y escritos doctrinales se convirtieron en verdaderos bestsellers de la época, con decenas de miles de copias circulando entre el pueblo llano.
Argula comenzó a ser conocida por escribir en 1523 su famosa carta de protesta a la Universidad de Ingolstadt, que había obligado a retractarse de manera humillante a un joven profesor, Arsacius Seehofer, que había estudiado en Wittemberg y había abrazado la fe reformada.
Argula Stauffer había nacido en 1492 en el seno de una distinguida familia de la nobleza de Bavaria venida a menos, y fue educada como dama de compañía de la duquesa Kinigunde, hermana del emperador Maximiliano. Al salir de su casa, su padre le regaló una copia de la Biblia Koburger de 1483, una traducción alemana correcta pero de estilo monótono. Ella no le prestó mucha atención, dado que los frailes franciscanos le advirtieron que su lectura podría desviarla por el mal camino. Poco después de llegar a la corte, supo que sus padres habían sucumbido a la peste, y en 1516 casó con Friedrich von Grumbach, también de la nobleza, con quien tuvo cuatro hijos.
En la década de 1520, los escritos de Lutero circulaban por Bavaria y Argula leía ávidamente todos los que podía conseguir. Espalatino, capellán de Federico el Sabio, el príncipe protector de Lutero, le había enviado una lista completa y se sabe que Argula mantenía correspondencia con Lutero. Antes de escribir su carta a la universidad, consultó con el pastor evangélico de la ciudad, que después dijo de ella que era una mujer increíblemente versada en las Escrituras, pero no hizo más. Argula consideró que si ningún ministro reformado iba a alzar la voz contra aquella injusticia, ella lo haría. Y escribió su famosa carta. Pero no fue lo único que escribió. El impacto de la carta en defensa de Seehofer fue tremendo. El Duque, que había influido para salvar al muchacho, recibió también una copia junto con otra carta dirigida a los magistrados y autoridades, en la que Argula denunciaba la explotación económica y la inmoralidad practicadas por el clero católico, leal a los papas.
Alguien escribió sobre la copia de Munich, debajo de la firma de Argula: “Zorra luterana y puerta del infierno”. La universidad no se iba a rebajar a contestar a una mujer. El Duque tampoco contestó. Pero surgieron coplillas populares que extendieron la controversia. Las autoridades no iban a dejar pasar todo esto. La universidad se puso de acuerdo con el Duque, y se rumoreaba que habían decidido dejar a Argula a merced de la disciplina de su marido, que tenía autoridad para cortarle unos cuantos dedos o incluso de estrangularla sin riesgo de que nadie presentara cargos contra él. Lo que de hecho excitó las iras de éste fue perder su cargo de prefecto del Duque. Con una esposa y cuatro hijos que mantener, se desató su rencor y se sabe que la maltrataba. A todo ello, había que añadir el escarnio público. Un sacerdote se refirió a Argula el día de la festividad de la Virgen María como “una insolente hija de Eva, una zorra herética y una sinvergüenza errada”.
En 1523, el conde Espalatino convocó una dieta en Nuremberg y, llevado de la curiosidad, invitó a Argula a hablar en ella con total libertad. Así lo hizo, y después escribió una carta en la que se regocijaba de que el conde estuviera vislumbrando la luz, animándole a testificar de Cristo con alegría y sin temer los poderes terrenales. En otra carta, dirigida a Federico el Sabio, expresaba su esperanza de que Dios ayudase en la dieta a los encargados de predicar al pueblo llano, y atase las manos de los sacerdotes paganos que vuelven a crucificar a Cristo. A pesar de todo, parece que Argula salió de allí desalentada, porque a la mayoría de los príncipes sólo les preocupaban las comilonas y los banquetes.
Argulla estaba sola y su propia familia estaba contra ella, ni siquiera sus hermanos la acompañaban en su lucha.
Argula se comunicaba regularmente con Lutero, que le dijo a Espalatino: “Te envío las cartas de Argula von Grumbach, discípula de Cristo, para que veas cómo los ángeles se regocijan porque una hija pecadora de Adán se ha convertido y ha sido hecha una verdadera hija de Dios”. En otra ocasión, Lutero escribe a un amigo: “El Duque de Bavaria arremete enfurecido, matando, aplastando y persiguiendo el evangelio con todo su poder. Sin embargo esa noble mujer, Argula, está allí peleando una valiente batalla con gran espíritu, discurso atrevido y conocimiento de Cristo. Ella merece que todos oremos por la victoria de Cristo en ella. Ha atacado a la universidad de Ingolstadt por forzar la retractación de cierto joven, Arsacius Seehofer. Su marido, que la trata tiránicamente, ha sido depuesto de su prefectura por eso. No podemos ni imaginarnos lo que le hará ahora. Ella está sola entre aquellos monstruos, y sigue firme en la fe, aunque según admite, no sin temblar de miedo por dentro. Es un singular instrumento de Cristo. La encomiendo a ti, para que Cristo, a través de esta débil vasija, confunda a los poderosos y a aquellos que se glorían en su fuerza”.
Sabemos que Argula instó a Lutero a dar testimonio de la verdad contrayendo matrimonio. Refugiado en el castillo de Coburgo, Lutero recibe la visita de Argula y quien transmitió a su esposa Catalina consejos para destetar a su bebé.
En mayo de 1563, 40 años después de su primera aparición pública, el Duque de Bavaria comunicó al ayuntamiento de una ciudad de sus dominios que por segunda vez había encarcelado a la “vieja Stauffer” (su nombre de soltera), que incitaba a la gente a la desobediencia haciendo circular libros contrarios a la religión católica. Ya no iban a las misas de la iglesia, sino a reuniones clandestinas en su casa. Incluso había ido al cementerio y oficiado funerales sin ceremonias cristianas, a pesar de que la Biblia, la ley canónica y la ley civil prohíben que una mujer usurpe tales funciones. Pero al poco tiempo fue liberada.
Fue la primera mujer autora de panfletos que promovían la libertad académica y la incorporación del concepto de sola scriptura. Sus panfletos de los años 1523 y  1524 fueron muy numerosos y alcanzaron cerca de 30.000 lectoras y lectores en Baviera y en lugares más lejanos.


Brigitta Wallner (1735-1799)

Fue esposa de un leñador. Trabajando como cochera, esta madre de 7 hijos e hijas contrabandeaba Biblias. Profesó sin miedo su fe protestante y promulgó la libertad religiosa en Austria. Por causa de esto fue encarcelada tres veces.
Luego de la Patente de la Tolerancia en 1781, Birgitta Wallner se registró como luterana. Esto llevó a que toda la congregación de Gosau siguiera su valiente ejemplo.


Catarina von Bora

Catarina von Bora
Catarina fue una monja católica alemana que se convirtió al protestantismo.
Se casó con Martín Lutero, líder de la Reforma Protestante, quien cariñosamente la llamaba Señora Caty (Frau Käthe ). Se considera que Catalina, una de las mujeres más importantes de la Reforma debido a su papel, ayudó a definir la vida de familia protestante y fijar los matrimonios del clero.
Infancia y vida como monja
Catalina de Bora era hija de Hans von Bora y Catalina von Bora. Nació el 29 de Enero de 1499 en Lippendorf, al sur de Leipzig, Alemania. Salió adelante en una familia de nobles empobrecidos de Sajonia, probablemente con tres hermanos y una hermana.
Su madre murió cuando ella tenía cinco años (en 1504) y su padre volvió a casarse, enviando a Catalina a un convento benedictino en Brehna (cerca de Halle). En 1508, su padre la llevó a otro convento, esta vez de la Orden del Císter en Nimbschen, cerca de Grimma. Una de sus tías paternas, Magdalena von Bora, era monja en el convento, y una tía materna, Margarete von Haubitz, era la madre superiora. El 8 de Octubre de 1515, con 16 años de edad, tomó los votos como monja. En el convento aprendió a leer, escribir y algunas nociones de latín.
Después de varios años de vida religiosa, Catalina se interesó cada vez más por el movimiento de Reforma y creció su descontento con su vida en el convento, conspirando con otras monjas para huir de él. Sin embargo, esto era muy difícil, ya que dejar la vida religiosa era una ofensa castigable con la muerte.
La víspera de Pascua de 1523, huyeron con la ayuda de Leonhard Köppe, un comerciante, a Toragu. Las monjas se escaparon con éxito ocultas en el carro cubierto de Köppe entre los barriles de pescado, huyendo a Wittenberg. Lutero consiguió ayudar y encontrarle empleo a todas las monjas, excepto a Catalina que vivió con la familia de Phillipp Reichenbach, el vendedor de la ciudad de Wittenberg, y luego en casa de Lucas Cranach el Viejo y su esposa, Barbara Brengebier. Catalina tenía un buen número de pretendientes, pero ella solamente estaba dispuesta a casarse con Lutero.
Su conmemoración es el día 20 de diciembre en el calendario litúrgico luterano como un ejemplo de mujer que vive su fe y busca a Cristo en medio de las dificultades de su época.
Matrimonio con Lutero
Lutero finalmente se enamoró de Catalina y el 27 de Junio de 1525 fueron casados por Johannes Bugenhagen. El matrimonio tomó como casa un antiguo monasterio agustino de Wittenberg, que Juan Federico I de Sajonia, hijo del protector de Lutero (Federico III de Sajonia), había cedido al matrimonio como regalo de boda.
Catalina adquirió inmediatamente la tarea de administrar y de manejar las tenencias extensas del monasterio, de la crianza y de la venta de ganado y del funcionamiento de la cervecería, para mantener a su familia y a los estudiantes y visitantes que buscaban audiencias con Lutero. En tiempos de enfermedades muy extendidas, Catalina utilizaba el monasterio como hospital, cuidando a los enfermos junto a otras enfermeras.
Durante su matrimonio con Lutero, tuvieron 6 hijos, de los cuales las dos primeras hijas murieron con 8 meses y 13 años, respectivamente. No gozaban de gran bienestar económico, sino de lo poco que cobraba Lutero y del alquiler de alojamiento que ofrecían a los caminantes y peregrinos. Lutero estaba enamorado de su esposa tal y como lo demuestra en sus cartas. Catalina von Bora, además de trabajar, cuidar, educar, encontraba tiempo para leer la Biblia. Así mismo, podemos destacar de su vida que encontró tiempo para leerla entera y meditarla en su corazón. Su matrimonio con Lutero duró 20 años hasta que fallece éste.
Catalina y Martín tuvieron seis hijos: Johannes (Hans) (1526-?), Elizabeth (1527-1528) murió con ocho meses, Magdalena (1529-1542), Martín hijo (1531-?), Paul (1533-?) y Margarete (1534-1570). Además, los Lutero criaron a cuatro niños huérfanos y a Fabian, sobrino de Catalina.
Tras la muerte de Lutero
Cuando murió Martín Lutero en 1546, comenzaron los problemas financieros para Catalina, ahora sin el sueldo de Lutero como profesor y pastor. Le ofrecieron la posibilidad de mudarse de la vieja abadía, pero la propuesta fue rechazada inicialmente. Al poco tiempo, Catalina tuvo que huir a Magdeburgo debido a la guerra de Esmalcalda. El acercamiento de la guerra forzó otra huida en 1547, esta vez a Brunswick. En julio de ese año, se acaba la guerra y vuelve a Wittenberg. Los edificios y las tierras del monasterio habían sido destruidos y estaban llenos de basura. Económicamente, no podían permanecer allí. Gracias a la generosidad de Juan Federico I de Sajonia y a los príncipes de Anhaltt, permanece en Wittenberg hasta 1552, cuando un brote de peste negra la forzó a salir de la ciudad una vez más. Huyó a Torgau donde su carro estuvo implicado en un accidente cerca de las puertas de la ciudad, que le causó una rotura de pelvis entre otras heridas. Catalina murió en Torgau tres meses después, el 20 de Diciembrede 1552, a los 53 años de edad. Fue enterrada en la iglesia de Torgau, lejos del sepulcro de su marido en Wittenberg.

Herzogin Elisabeth von Rochlitz (1502-1557)

 
Herzogin Elisabeth (4 de Marzo de 1502 - 6 de Diciembre de 1557) fue princesa de Hesse y princesa-heredera de Sajonia por casamiento. Después de la muerte de su marido, el príncipe-heredero Jun de Sajonia, pasó a gobernar independientemente los territorios a los que tenía derecho por viudez que abarcaban los distritos de Rochlitz y Kriebstein. Esto le valió el nombre de "Elizabeth de Rochlitz".
Infancia y Juventud
A infancia de Elizabeth quedo marcada por la lucha de su madre, la duquesa Ana de Mecklemburgo-Schwerin, contra los estados de Hesse. En 1509, después de la muerte de su padre, su madre violó las instrucciones dejadas por su marido en el testamento y creó un consejo con cinco miembros, liderado por el escudero Luis de Boineburgo para Lengsfeld. Este consejo asumió la gobernación del territorio en nombre del conde Felipe I, hermano de Elizabeth, y Ana quedo a cargo de los hijos.
Durante este período, Elizabeth vivió con la madre en Giessen, la tierra que había heredado como viuda, mientras que su hermano permaneció en Cassel bajo la supervisión de Luis de Boineburgo.
Elizabeth y su madre dependían financieramente del consejo y no recibían mucho dinero. Tal hecho se puede ver, entre otras cosas, en un incidente que ocurrió en 1512. En ese año, la tía de Ana, Catarina, se casó con el duque Henrique IV de Sajonia. Ana quería aprovechar esta ocasión para presentar a Elizabeth en la corte da Sajonia, una vez que ella estaba comprometida con el príncipe Juan, hijo mayor de Jorge, el Barbudo, desde muy pequeña. Ana pidió algún dinero al consejo para poder mandar hacer un vestido apropiado para su hija, pero se lo negaron. Entonces, Ana decidió no llevar a su hija a Dresden, debido suas "ropas deshilachadas". Debido a sus dificultades financieras, Elizabeth se volvió muy humilde y cercana a los ciudadanos comunes.
Recién en 1514 Ana consiguió el control sobre sí misma y sus hijos, así como la regencia de Hesse. Ana consiguió la guarda de sus hijos, pero no tenía ninguna influencia sobre los consejeros. A partir de entonces, Ana vuelve a vivir con su hermano y su madre en Cassel.
En la Corte de Dresden
El noviazgo entre Elizabeth y Juan se oficializo el 8 de Marzo de 1515, después de que el papa habría pasado una dispensa para su casamiento (los dos eran parientes lejanos). Elizabeth todavía vivía con la madre en Cassel. En 1516, Juan fue hasta Marburgo donde se celebraron las nupcias. Elizabeth solo paso a vivir permanentemente en la corte de Dresden en Enero de 1519. El casamiento se celebró el 7 de Junio de 1519 en Cassel.
Tal como a su madre, en Dresden, Elizabeth lucho constantemente por su independencia contra el duque Jorge, el Barbudo, y los oficiales de la corte. Juan, que estaba constantemente enfermo, tampoco se lograba imponerse delante de su padre dominador. El matrimonio no conseguía tener hijos y la presión de la corte para que esto sucediera llevo a que Elizabeth sufriese de insomnio crónico. Durante este período, Elizabeth mostro por primera vez a su personalidad y sus capacidades diplomáticas. Por ejemplo, consiguió que su hermano y su madre hicieran las paces cuando su madre quería que Felipe se volviese a casar después de la muerte de su esposa y este se negó a hacerlo. Elizabeth volvió a ser a mediadora entre los dos cuando volvió a haber tensión por causa de la Reforma en Hesse (su madre no quiso dejar su fe católica). Durante este período, Elizabeth también cuido del duque Mauricio de Sajonia.
Rochlitz y Schmalkalden
Cuando Juan murió el 11 de Enero de 1537, Elizabeth se mudo para Rochlitz, un distrito que había recibido por el derecho de viudez. Con todo, la corte de Sajonia no le quería dar un rendimiento independiente, lo que casi pasa por la misma situación que su madre. Sin embargo, Elizabeth consiguió evitar esta situación con la ayuda do hermano. Recibió el distrito de Rochlitz que incluía la ciudad y el castillo de Rochlitz, Mittweida y Geithain, y el distrito de Kriebstein que incluía Waldheim y Hartha. Por estas conquistas, su nombre aparece como "de Rochlitz".
Elizabeth permitió que los ciudadanos de sus territorios se convirtiesen al luteranismo a partir de 1537 mientras que el resto de Sajonia, que pertenecía a su suegro, siguió rigorosamente el catolicismo. Su hermano le envió el predicador protestante Johann Schütz en ese mismo año. Durante este período, Elizabeth se volvió consejera del príncipe-elector Mauricio de Sajonia cuando este sucedió a su padre. En Rochlitz, Elizabeth crio a su sobrina Bárbara, hija de su hermano Felipe, que sería condesa de Württemberg-Mömpelgard.
Elizabeth, princesa de Hessen y, por casamiento, princesa heredera de Sajonia ejerció un papel clave contra la oposición de su suegro, el duque Jorge, a la introducción de la Reforma Protestante en Sajonia. Ella también se empeñó en la nominación de clérigos protestantes en la región. Los monasterios permanecieron intactos.
En 1538 ella se integró a la Liga Esmalcalda, procurando por todos los medios de impedir la guerra.


Olimpia Fulvia Morata

 
Nacida en Ferrara, en 1526, falleció en Heidelberg, el 26 de Octubre de 1555, Olimpia era una humanista italiana y protestante que escribió numerosas obras relacionadas con la religión y el pensamiento.
Su padre, Fulvio Pellegrino Morato, era tutor de la Casa de Este, y por esto, creció rodeada de conocimientos, aprovechando incluso las clases de su padre a los jóvenes hijos del duque de Ferrara. A los doce años ya hablaba con fluidez el latín y griego antiguo y fue nombrada compañera de Ana de Este en la corte donde pudo tener contacto con la elite intelectual y acceso a las obras de Cicerón o de Calvino.
En 1546, dejó la corte para cuidar a su enfermo padre, además se ocupó de la educación de sus hermanos. Su padre se había convertido al protestantismo y Olimpia no tardó en abrazar las doctrinas de Lutero y Calvino. Al regresar a la corte, Ana de Este se casó con Francisco de Guisa y pasó el tiempo estudiando filosofía y manteniendo correspondencia con Gasparo Sardi, quien le dedicó su De Triplici Philosophia.
Con la nueva situación de Ana de Este, y después, la muerte de su padre en 1548 ya poco la relacionaba con la corte de la casa de Este la cual acabó abandonando.
Un año más tarde conocerá a un joven estudiante de medicina y filosofía en Baviera, Andreas Grundler von Schweinfurt, con el que se casará en 1550 por la iglesia protestante. Vivieron en Italia pocos años más ya que la pareja marcharía a Alemania, donde Olimpia continuaría sus estudios, profundizando en textos clásicos y la Biblia. En 1554, lo acompañó a su lugar de nacimiento donde había sido enviado para curar a las tropas españolas.
En 1553 Alberto de Brandeburgo tomó posesión de Schweinfurt tras el asalto de esta ciudad por parte de las tropas imperiales de Carlos V y hubieron de huir a Heidelberg por la defensa de Olimpia a la reforma protestante. Buscaron refugio en diferentes cortes europeas lográndolo al fin, en la corte de los Erbach. Pero lamentablemente Olimpia morirá dos años después, el 26 de Octubre de 1555 en Heidelberg, a consecuencia de la epidemia de peste que asolará distintas ciudades europeas. Tenía tan sólo 29 años.
Se publicaron póstumamente por parte de su marido y de algunos amigos humanistas: cartas, poemas y sus obras (entre estas sus misivas en latín y griego) póstumamente en Basilea en el año 1558.
Obras fueron:
·         Olympiae Fulviae Moratae Foeminaw doctissimae ac plane divinae Opera omnia quae hactenus invenire potuerunt; cum erudotorum testimoniis et laudibus. Hippolitae Taurellae Elegia elegantissima. Quibus Coelii S. C. selectae Epistolae ac orationes accesserunt, Basilae, apud Petrum Pernam MDLXX
·         Lettere, en «Opuscoli e lettere di riformatori italiani del Cinquecento», Bari 1927
·         Epistolario (1540-1555)
·         Opere, a cura di Lanfranco Caretti: vol. I, Epistolae; vol. II, Orationes, Dialogi et Carmina, Ferrara, Deputazione Provinciale Ferrarese di Storia Patria 1954.


Wibrandis Rosanblatt

Nacida en Bad Säckingen en 1504 y fallecida en Basilea, el 1 de noviembre de 1564, fue la mujer de tres famosos reformadores religiosos, que murieron antes que ella: Johannes Oecolampadius (casados entre 1528 y 1531), Wolfgang Capito (casados entre 1532 y 1541) y Martín Bucer (casados entre 1542 y 1551), compartieron su vida privada y espiritual con ella.
Wibrandis era la viuda de Ludwig Keller antes de su casamiento con Oecolampadius. Fue la madre de un total de 11 hijos e hijas.
Nació en 1504 en Bad Säckingen y creció en Basilea. Vivió en un tiempo de mucha turbulencia en Basilea, Estrasburgo y Cambridge. Aún en condiciones difíciles, ella mantuvo la hospitalidad, acogiendo parientes huérfanos y refugiados religiosos y se escribió con las esposas de varios reformadores.
Murió víctima de la plaga que azotó Basilea en 1564.

1 comentario:

  1. Gracias por estos aportes para enriquecer nuestra comprensión del proceso de la REFORMA con el protagonismo de muchas mujeres muy valientes que hicieron aportes bíblicos, teológicos y pastorales esenciales.

    ResponderEliminar