Ése es el tiempo que estuvimos mi familia y yo transitando por las rutas del sur de la provincia de Buenos Aires y La Pampa.
Hemos pasado por muchas cosas: sequía, lluvias intensas, temporales e incendios... literalmente. Porque este lugar que hemos llegado a amar, climáticamente tiene estas características.
Pro también me refiero a estas cosas metafóricamente hablando. Hemos pasado muchas cosas: buenas y malas, lindas y feas, emotivas y no tanto... Hemos reído, hemos sufrido, nos hemos enojado y nos hemos reconciliado... y Dios nos acompañó y nos bendijo.
No es casual que el nombre de la Congregación sea Semillas y el del boletín Espiga... hemos sembrado y cosechado, porque los diez años nos lo permitieron.
Las despedidas siempre son difíciles, porque nuestro corazón se desgarra.
Hemos caminado un tiempo juntos, y ahora llegó el tiempo en donde nuestros caminos se bifurcan, pero siempre caminando a la luz de Dios (como dice la canción).
Por eso les decimos "hasta luego" y "gracias", de todo corazón.
"Y hasta tanto nos volvamos a encontrar, Dios nos guarde en la palma de sus manos".
Estela Andersen
Hasta pronto bellos y nos volveremos a encontrar.
ResponderEliminarPensar que pasó tanto tiempo! Es triste la despedida. Pero se que también debe haber un agradecimiento profundo de la comunidad que ha visto la mano de Dios a través de ustedes. Bendiciones para la familia
ResponderEliminar