Porque si bien amaneció medio nublado y nos creó una expectativa un poco gris, la alegría del encuentro hizo que el sol se animara a salir avanzando la jornada.
El desayuno estuvo en consonancia con el verde de la temática: "Nuestra huella ecológica".
En un primer momento hablamos acerca de la Campaña de Hora de Obrar de este año y de ahí el tema, que desarrollamos a través del relato de la creación en Génesis 1.
Y salimos a ver la creación, a descubrir sus sonidos, sus colores, sus aromas.
Vimos también como cada ser vivo de la creación tiene una función, incluso aquellos que trabajan para descomponer lo muerto para abonar y enriquecer la tierra.
Vimos los nidos de las aves, después de haber escuchado su canto e identificado sus características.
Claro, como todo en la creación, la diversidad es una impronta también en la construcción de los nidos.
Buscamos huellas por todo el parque y vimos estas pequeñas en el barro.
Lamentablemente lo que más vimos fueron nuestras huellas, las humanas... pero no en las pisadas de nuestros pies, sino en la basura de desparramamos por todos lados.
Entonces compartimos los videos que elaboraron los jóvenes en su campamento de verano, en donde trabajaron en el cuidado del planeta. Vimos que algo muy importante aparte de reforestar (que es la invitación de la campaña de Navidad de este año) es muy importante reducir la basura y por supuesto, reciclar. Cuidar el agua, la tierra y mirar muy bien los envases de los productos que usamos y qué es lo que consumimos. Para que la vida nos sobreviva.
De tarde pintamos unas bolsas de tela para ayudar a nuestras familias a dejar de lado las bolsas plásticas... o al menos, reducirlas.
Mientras que Walter, Nico y Ryan fueron a buscar las cañas y la leña para el fogón de la noche, con los y las que quedaron jugamos al juego de las 7 maravillas.
Tenían que buscar:
- 1 corteza de árbol suelta de la planta
- 3 hojas diferentes
- 1 piedra redonda
- 1 piña caída en el suelo
- 1 hormiga viva
- 1 flor
- 1 palo especial
Benjamín, Caren y Priscila |
Jimena, Sasha, Jonás y Tomi |
Silvina, Malena, Mili y Morena |
Después de la merienda, tal como lo había anunciado al comenzar la jornada, preparamos "bombas de semillas", para celebrar la Navidad con más Vida y menos ruido.
Primeramente amasamos la tierra con agua formando un barro bien consistente.
Luego le agregamos semillas de perejil, cilantro, acelga y melón entre tod@s.
Volvimos a amasarlo bien.
Y entre tod@s hicimos las bombas.¡Miren como quedaron nuestras manos!
Después las pusimos a secar. Esto es importante para que las semillas no germinen antes de tiempo. Luego las arrojaremos por todos lados para que, una vez que caiga la lluvia, brote la vida de cada una de las bolitas.
Como ya es una tradición también, cenamos pan de palo con los peques, y algunos papis y mamis nos acompañaron, ya que les encanta este espacio tan mágico.
En la mañana del domingo, en e culto compartimos lo que hicimos en el campamento y ya invitamos a los niños y niñas a comenzar con los preparativos navideños, en el mes de Noviembre.
Una vez finalizado el culto volvimos al parque en donde nos esperaba este cordero
y compartimos un almuerzo comunitario.
¡Muchas gracias chicos y chicas por la buena onda!
¡Muchas gracias a los papis y mamis y toda la comunidad que se acercó para traer algo rico u ofrecer su ayuda!
¡Gracias a Dios que siempre nos bendice una y otra vez!
Estela Andersen
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