Después de una breve presentación de la temática, en donde se analizó el significado de poder tanto según la Real Academia Española, como en los idiomas hebreo y griego.
Se trabajó en tres grupos, en donde primero cada uno reflexionó sobre:
- Ex.3:7-15, el llamado de Moísés, en donde se pudo ver el estupor de Moisés y de su pueblo; y en Sam.8:6-18, en donde Dios le dice a Saúl "no es a ti a quien rechazan, sino a mí"
- Gn.17:1-2, Dios se presenta como el Topoderoso "El Shadday", la promesa a Abraham; y en Dt.17:14-20, en donde advierte el peligro del rey de creerse más que los demás.
- Ex.15:3, Dios como Sebaot, un Dios protector; y Am.7:1-17, en un diálogo entre el sacerdote y el profeta se expone la importancia del profeta para "limitar" al rey en sus caprichos, como la voz de Dios.
En un segundo momento los grupos reflexionaron sobre lo siguiente:
- Lc.9:46-48, ante la pregunta ¿quién es el más importante? Jesús responde, sean como niños.
- Mt.4:1-11, las tentaciones de Jesús en el desierto como modelos contrapuestos: Dios vs corrupción
- Mc.10:35-45, la búsqueda de lugares privilegiados no tiene nada que ver con el modelo de Jesús: el más grande es el que sirve, siguiendo los pasos de Jesús.
Finalmente Darío nos presentó tres escritos que fueron repartidos uno por grupo en donde aparecía la visión de quienes tenían el poder de Pedro Valdo, de Martín Lutero y de Juan Calvino.
Como no podía ser de otra manera, terminamos compartiendo una cena a la canasta, porque también del pan vive el humano.
¡Muchas gracias, Darío, por aceptar nuestra invitación y por todo el conocimiento compartido! ¡Que Dios te bendiga en tu ministerio!
Estela Andersen
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