miércoles, 30 de octubre de 2019

31 de Octubre, Día de la Reforma Protestante

“Pues el evangelio nos muestra de qué manera Dios nos hace justos: es por fe, de principio a fin.  Así lo dicen las Escrituras: ‘El justo por la fe vivirá.’” 
Romanos 1,17

El 31 de Octubre se celebra, en el seno de las iglesias evangélicas, el Día de la Reforma protestante.  En ese día del año 1517, el monje agustino Martín Lutero clavó una propuesta a las puertas de la iglesia de Wittenberg, Alemania, para debatir la doctrina y práctica de las indulgencias por parte de la iglesia de su tiempo.  Esta propuesta fue popularmente conocida como las ‘95 tesis’.  
Los postulados básicos de la fe evangélica, se pueden sintetizar en:
1) Sola Gracia: Cristo es el único que puede justificarnos.  Las obras, incluidos los ritos eclesiales y cualquier otro tipo de esfuerzo humano, no son la causa de la salvación del hombre.  La salvación es obra de la sola gracia de Dios: Porque ustedes han sido salvados por su gracia, mediante la fe.  Esto no proviene de ustedes, sino que es un don de Dios; y no es el resultado de las obras, para que nadie se gloríe (Efesios 2,8-9).
2) Sola Fe: La fe es lo único que, mediante la gracia de Dios, nos salva.  Ninguna obra puede salvarnos, sino sólo la fe.  Dice el apóstol Pablo: En el Evangelio se revela la justicia de Dios, por la fe y para la fe, conforme a lo que dice la Escritura: El justo vivirá por la fe (Romanos 1,17).
3) Sola Escritura: La única fuente de revelación y norma de vida son las Sagradas Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamento.
4) Solo Cristo: El único fundamento de la fe es Jesús.  El fundamento ya está puesto y nadie puede poner otro, porque el fundamento es Jesucristo (1 Corintios 3,11).  Hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres: Jesucristo (1 Timoteo 2,5).

jueves, 24 de octubre de 2019

Sobre las elecciones presidenciales y legislativas en Argentina y Uruguay


El próximo 27 de octubre ciudadanos de Argentina y Uruguay concurriremos a las urnas a fin de elegir quiénes serán los titulares de los Poderes Ejecutivo y Legislativo por los próximos cuatro y cinco años, respectivamente. El voto es un derecho, pero al mismo tiempo un deber cívico que debemos gozar y cumplir en tanto ciudadanos. Pero también es la manera a través de la cual los cristianos y las cristianas damos testimonio de nuestra fe y ejercemos un servicio en favor de nuestros hermanos y nuestras hermanas.
El pastor y teólogo José Míguez Bonino reflexionaba: “La política es el esfuerzo por recuperar el mundo para los [seres humanos], por sacarlo del poder de la irracionalidad, del egoísmo de un grupo o de la arbitrariedad de un sistema inhumano y devolverlo a su propósito: Servir para el enriquecimiento y la plenitud de la comunidad humana. Y ésta es una obligación cristiana fundamental. No se puede ser cristiano sin asumirla, porque no se puede ser [humano] sin hacerlo”
La participación ciudadana de los cristianos y las cristianas exige que hagamos propias las necesidades de nuestros hermanos. Cuando votamos de esa forma, entonces nos volvemos obedientes seguidores de nuestro Señor y hacedores de una sociedad más justa y pacífica, donde los derechos humanos más elementales tales como el trabajo, el acceso a la educación, salud, vivienda, justicia, seguridad, un hábitat sustentable y tantos otros derechos que dignifican la vida de hombres y mujeres sean una realidad para todas las personas.
Por eso, oremos al Señor para que este tiempo de elecciones no se encuentre condicionado por egoísmos ni mezquindades, temores o indiferencias, tampoco por odios o revanchismos, sino que sean más bien una oportunidad para seguir a nuestro Señor Jesucristo que obró siempre en favor de los pobres y los débiles.
Pastor Leonardo Schindler

Presidente de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata.

jueves, 3 de octubre de 2019

Encuentro sureño abordó sobre mujeres importantes en mis orígenes

En un marco alegre a la vez que reflexivo se llevo a cabo en Bahía Blanca los días 28 y 29 de septiembre el “25° Encuentro de mujeres sureñas”. El tema que nos convocara fue: “Mujeres importantes de mis orígenes”.
Durante la mañana del sábado dialogaron acerca de la evolución de la mujer en la historia. Por la tarde se compartieron quienes habían sido las mujeres importantes en sus vidas y de qué modo habían marcado a cada una de las participantes. También cuáles de las mujeres de la Biblia más les había impactado.
El culto dominical estuvo signado por un alto espíritu festivo. La predicación estuvo a cargo de la pastora Annedore Venhaus quien en su predicación destacó que “Dios coloca en nosotras un espíritu del poder, obviamente no en el sentido de violencia y autoritarismo, sino de aquella certeza de fe que nos anuncia que sí podemos hacer algo, que sí lo podemos lograr y que sí debemos seguir dando testimonio de aquello de lo cual estamos convencidas porque en nosotras ha fructificado.
Por otra parte, profundizó que “Dios coloca en nosotras un espíritu de amor como aquella pasión por la causa, por la vida, por el prójimo, por Dios que te ayuda a sobreponerte, a traspasar los límites, a buscar caminos allí donde ya nadie los cree posibles. Dios coloca en nosotras un espíritu del buen juicio para diferenciar aquello que corresponde a la voluntad de Dios de lo que no lo hace… para empoderarnos a tomar decisiones sobre lo que vamos a atesorar de nuestros legados espirituales y lo que mejor descartaremos”.

Encuentro ecuménico e interreligioso de Bahía Blanca

El miércoles 18 de septiembre se realizó un encuentro judeocristiano en Bahía Blanca. Participaron como expositores el pastor David Cirigliano, de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP); el profesor Gabriel Anmuth, de la Comunidad Judía y  Leticia Batista, de la Iglesia Católica.
La charla fue organizada por el grupo ecuménico y la confraternidad judeocristiana de la ciudad. Donde el tema tratado fue “el otro y yo”. Para entender que representan los demás en este momento de la sociedad. Se celebró la diversidad, destacando los valores comunes en la fe. Reflexionaron que “el otro” es esa persona infinitamente amada por Dios; no importa su raza, religión o sexo. Si vive en una villa o en un palacio.
Existe la necesidad de convivir con las diferencias, fomentando el dialogo social, teniendo en cuenta que queremos lograr un mundo más justo. Se debe tener un oído en el evangelio y el otro en el pueblo. No ignorar la realidad que nos atraviesa. El pastor Cirigliano aprovechando el momento de dialogo no quiso hacer distinción entre otro u otra. Invitó a que los presentes se animen a pensar a Dios como padre y madre, o porque no como una Diosa.
“Pensar ese Otro que se revela y al cual hago concreto en el servicio para con ese otro y otra. Abrirse a la vida es ir al encuentro de quien camina a nuestro lado, tanto interpelando como siendo interpelados. Amando, como siendo amados”, finalizó  “Les doy este mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros. Así como yo los amo a ustedes, así deben amarse ustedes los uno a los otros”.

El Sur está de pie

Se llevó a cabo en Bahía Blanca y participaron alrededor de 30 hermanas y hermanos de las comunidades del Distrito Sur de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP). Contaron con la presencia de la Secretaria General de la IERP pastora Sonia Skupch, quien estuvo a cargo del taller. Ayudó al distrito a reflexionar sobre sus debilidades y fortalezas, invitándolos a seguir trabajando en este camino de fe.
Skupch resaltó que el sur tiene una amplia apertura ecuménica, una gran integración y hacen sentir a las personas cómodas.
Al finalizar el taller se quedaron con la certeza que a pesar de estar pasando por un momento de incertidumbre, tienen la necesidad de caminar juntos y que pueden salir adelante gracias a los recursos con los que cuentan.
Además participó de la conferencia Guido Forstuber, encargado del Área de desarrollo de recursos de hora de obrar. Comentó las diversas actividades e invitó a participar de ellas. La Asamblea dio lugar a muchas emociones, donde el distrito se replanteó como seguir de pie y se puso en práctica lo reflexionado en el taller. Donde la frase que más resaltó fue “somos pocos pero resilientes”.
La despedida tuvo lugar en el culto final. Donde se agradeció a cada uno y a cada una por el esfuerzo que hacen día a día por sus congregaciones. Con mucha alegría y sumando a su mochila otra experiencia como comunidad, cada hermano y hermana se dispuso a volver a su hogar.