miércoles, 29 de agosto de 2012

Marcha contra el femicidio y la violencia de Género

El 24 de Agosto, al mediodía, se hizo una marcha en la ciudad de Bahía Blanca, con el lema "Pará la mano". Estuvimos presentes como no podía ser de otra manera, como parte del Grupo Ecuménico Bahía Blanca.

 La marcha vino por distintas calles del centro hasta llegar a la Municipalidad.
Como no podía ser de otra manera, estuvieron presentas las chicas del Centro de Prevención y Asistencia de la Violencia Familiar “El Nido
Hace un largo tiempo que, en las noticias, vemos como la violencia familiar, en especial contra la mujer, va en aumento. Se puede decir que, todos los días, se denuncian muchos casos de violencia y cada ves más los casos que terminan en muerte. A eso hay que sumarle que la gran mayoría de los casos no llega a ser denunciados.
Esta marcha intentó crear conciencia sobre esta realidad. Llamar la atención de nuestros gobernantes, jueces, la policía y la sociedad toda.
Y no hay mejor momento que generarla desde niños.

 Ellos, después de lo vivido, hicieron muchísimas preguntas respecto de lo que pasó, compartiendo sus impresiones.
 Jonás se puso delante de las cámaras para que lo tomaran...
 ..pero el camarógrafo parece ignorarlo.
La impresión que me dio es que todavía como sociedad no queremos hablar de este tema. Yo esperaba mucho más gente siendo parte de esta marcha, pensé que ante esta realidad seríamos una multitud, pero no. Pensé que muchísimas mujeres, entendiendo por lo que pasan sus pares, estarían presentes, pero no. Pensé que muchísimos hombres, que no están deacuerdo con lo que otros hombres hacen cuando maltratan a sus mujes, estarían presentes, pero no.  
Como Cristianos no podemos ser ajenos a esto; Dios, que es todo amor, nos ayude a ser parte se un cambio en esta sociedad. No podemos seguir siendo sólo unos espectadores de esta dura realidad y no hacer nada. Miramos el problema como si fuera sólo de otro, es hora de revisar esto. Somos llamados a ser testimonio, hagamos oír entonces la voz de los débiles ante los oídos sordos de quienes tienen el poder para ayudar a l@s que sufren.
Walter Lind

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