miércoles, 12 de abril de 2017

189° Aniversario de Bahía Blanca

 El 11 de Abril la ciudad de Bahía Blanca tuvo su 189° aniversario, oportunidad en la cual el Municipio incluyó en el protocolo una invocación interreligiosa en el acto oficial. Este es un espacio nuevo que se ha logrado al formarse la Oficina Municipal de Cultos, un gran logro que permite que quienes no somos católicos seamos visibilizados y tenidos en cuenta con el respeto y la dignidad que corresponde en una sociedad en donde convivimos en libertad diferentes credos.
Esta vez se invitó a un representante de la Iglesia Católica Romana, uno de la Comunidad Judía y una de las Iglesias Evangélicas Protestantes.
 El padre Roberto Buckle estuvo a cargo de la invocación:
"Señor Dios Nuestro, queremos invocarte, darte gracias y rogarte en este día del aniversario de la ciudad y el distrito de Bahía Blanca. Los aniversarios son para celebrar… y cuando celebramos ante todo recordamos y agradecemos. La ciudad y el distrito fueron construidos como se construye una casa que cobija a una familia, esta familia del pueblo bahiense que desde hace 189 años se congrega en torno a la misma plaza, contempla el mismo cielo y busca el mismo horizonte. Esta familia que fuiste congregando a lo largo de las décadas con integrantes originarios de esta tierra y con inmigrantes de miles de pueblos del país y del mundo… Esta casa fue construida con mucha proyectos grandes y con mucho esfuerzo.
Delante de Ti no nos olvidamos que desde la fundación y –sobre todo en los primeros tiempos- junto con el trabajo y las esperanzas hubo violencia, sangre, injusticia. Bandos de unos y otros… nuestra historia es compleja y nuestra vida lo es… pero el Salmo 126 “si el Señor no construye la casa, en vano trabajan los albañiles”… sabemos que Tú eres el constructor de esta casa que es nuestra ciudad. Pero un constructor muy especial, que respeta la libertad de los albañiles y que –con solicitud paterna- los corrige en sus yerros, los anima en sus desalientos, los perdona en sus pecados y los reconcilia en sus desencuentros.
Sabemos que con tu gracia y con nuestro compromiso, la historia se transforma. Y los episodios de angustia y de enfrentamiento pueden dar paso a la madurez social y al crecimiento, siempre y cuando haya corazones dispuestos a construir.
“Dios dispone que todas las cosas se transformen en bien para los que lo aman” (Rom. 8,28) dice San Pablo, y los creyentes confiamos en esto que nosotros llamamos “Providencia”, que no es ni más ni menos que el amor de un Padre que toma en su mano la historia y que –sin anular la libertad de cada uno ni la del pueblo en general- va ayudándonos a crecer potenciando las virtudes y aprendiendo de los errores…
Te pedimos Dios Nuestro que nos ayudes a tener un estilo fraterno de vida, un estilo reconciliado. Donde las ideologías estén al servicio del bien común y no al servicio de individuos o de grupos. Que las ideas, aun siendo luminosas y justas, no se expresen pisoteando los derechos de los demás o generando divisiones. Necesitamos comprometernos en un estilo de amistad social. La reconciliación se realiza en la memoria, la justicia y la búsqueda de la verdad, pero necesita de un corazón grande que dé siempre una nueva oportunidad, un corazón que nos movilice a tener la mano y a mirar a los ojos al vecino sabiendo que es un hermano, aun cuando piensa distinto. 
Que no nos acostumbremos a hablarnos mal, a ofendernos. Que hagamos de nuestros espacios de vida cívica, escuelas de diálogo. Donde nos valoremos y vaya despareciendo el ninguneo y la agresión. Una ciudad reconciliada es fuerte. Danos la gracia de entender que la reconciliación no es debilidad, sino grandeza humana.
Un estilo de vida reconciliado integra al excluido y lo siente hermano, acompaña al que está sólo, valora y defiende a la familia.
Dios Nuestro, Señor de la Historia, ponemos a la familia bahiense una vez más en tus manos, porque queremos ser familia. Amén."
El maestro de la Escuela Hebrea, Tomás Felder, de la Comunidad Judía, estuvo a cargo del mensaje:
"En este día que conmemoramos un nuevo aniversario de la fundación de nuestra ciudad, la ciudad de Bahía Blanca, queremos desde la comunidad judía dar nuestro mensaje de salutación y felicitación por 189 años de tan rica historia. Nuestra historia cuadra en aproximadamente la mitad de esos años, ya que la fundación de la asociación israelita se produjo en el año 1910. A lo largo de todo ese tiempo, habrá habido momentos de mayor esplendor y algunos de no tanto también, pero siempre hemos vivido bajo un halo de libertad que no es algo que podemos dar por sentado que ocurra. Ayer por la noche comenzó la festividad que conocemos como pesaj, la pascua judía. En ella se festeja o se conmemora lo que fue la salida del pueblo judío de la esclavitud en Egipto. Envalentonados por el profeta Moisés, el pueblo oprimido entendió que podía existir algo mejor que la esclavitud, eso que era vivir en un pesar de prisioneros y sin la facultad de emprender sus propios sueños y añoranzas. Ese anhelo de mejoría al que me refiero se lo conoce como libertad. De cada festividad que acaece en el calendario judío nos gusta rescatar algún valor o enseñanza que podemos usar para transmitir de generación en generación. No es casual que una de las ¨mitzvot¨ o mandamientos, de esta festividad sea la de ¨le enseñarás a tus hijos¨. Creo desde lo más profundo que una de las mayores aspiraciones del ser humano es la de ser libre desde el lugar que a cada uno le parezca. No podemos hablar de un solo tipo de ella, sino que cada uno pueda hacer uso de su margen de libertad y de esa manera realizarse como ser humano. La libertad es un valor fundamental y está en todos nosotros velar porque ella siga siendo un pilar de nuestros días y de nuestra sociedad. Sin ir más lejos, hoy estamos reunidos aquí representantes de distintas religiones o credos, llevando una mesa de culto conjunta. A eso es una de las cuestiones que hacemos referencia. En este breve mensaje queremos desear que Bahía Blanca pueda seguir siendo una ciudad adonde se respeten las libertades individuales, en donde nadie se sienta oprimido, donde se puedan hacer valer nuestros derechos y siempre teniendo en cuenta que el hecho de que nosotros tengamos libertad, no nos da lugar a interferir en las libertades de otros. Asimismo, que sepamos respetar el lugar que ocupa cada uno, ya que de esa forma podremos construir una sociedad mejor, con valores y prosperidad. Nuevamente, y para finalizar, felicitar a la ciudad en un nuevo aniversario de su creación, que siga fortaleciéndose a lo largo de los años venideros y que el mensaje que nos deja la festividad de pesaj que estamos transitando en estos días, sirva de reflexión para entre todos hacer de este un lugar mejor."
Y la pastora Estela Andersen, de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, estuvo a cargo de la oración y la bendición:
"DICHOSO quien sabe mirar a los otros
con los ojos de un amigo,
y acoge a cada persona
sin prejuicios de cultura, religión o raza.

DICHOSO quien se empeña
en vivir en armonía con sus familiares,
vecinos, compañeros, extranjeros,
superando las inevitables dificultades
propias de las relaciones humanas.

DICHOSO quien no guarda rencor,
no da importancia a palabras y gestos desagradables,
y no obliga a otros a vivir
según sus criterios.

DICHOSO quien comunica con dulzura,
escucha las razones de los demás,
sobre todo, la de los más débiles.

DICHOSO quien es tolerante consigo mismo
y convive serenamente
con sus propias limitaciones 
y con las de los demás.

DICHOSO quien estimula al bien,
para construir un mundo
en el que cada uno 
pueda sentirse a gusto.

DICHOSO quien acoge el valor de las diferencias 
que caracterizan a cada hombre
y cada mujer de nuestro planeta,
porque esas diferencias
muestran el "Nombre"
con el que Dios llama a cada uno de nosotros.

DICHOSO quien cultiva en su corazón un sueño que, 
dejando salir los colores de nuestra diversidad,
verá aparecer en el cielo un gran arcoiris
en señal de fraternidad y de paz,
que vestirá de luz y de fiesta al mundo.

íShalom!" 
(DICHOSOS LOS TOLERANTES - Patricia Wilson T., Chile)
La pastora cantó la "Bendición Irlandesa":
Que la tierra vaya abriendo un camino ante tus pasos
y que el viento sople suave a tus espaldas;
que el sol brille siempre cálido y benigno en tu cara;
que la lluvia caiga bien sobre tus campos.
Y hasta tanto nos volvamos a encontrar,
Dios te guarde en la palma de su mano,
y hasta tanto nos volvamos a encontrar,
Dios te guarde, Dios nos guarde, en sus manos.
Es una alegría ser parte de este nuevo camino en una ciudad tan importante como Bahía Blanca, un camino que seguramente no será fácil, pero necesario si deseamos ser una sociedad inclusiva.

Estela Andersen

3 comentarios:

  1. Ojalá siempre podamos vivir en paz y libertad en nuestra querida argentina

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  2. FELICIDADES Y BENDICIONES EN SU ANIVERSARIO, ICDC CONGREGACION DE AV. PERU, ASUNCION, PARAGUAY.

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