Fiesta de Acción de Gracias y Culto en Bahía Blanca

 El sábado 1 de Junio, en el marco de las Fiestas Congregacionales de Acción de Gracias, la comunidad de Bahía Blanca organizó un "Té Cultural".

 La propuesta era darse a conocer como Iglesia en la ciudad de Bahía Blanca, buscar el encuentro y la comunión desde el espacio del trabajo comunitario y además recaudar fondos para la caja central de la Congregación.

 Después de una ardua pero entusiasta preparación del Té, con la invitación a artistas locales, la promoción de la actividad, el armado del salón y la elaboración de una variadísima producción de panes, masitas, budines y tortas, llegó el día. La gente llegó con entusiasmo en un clima absolutamente propicio para sentarse en el calorcito y comer cosas ricas mientras que se comparte la buena compañía.

 Comenzamos con un espacio de canto comunitario guiado por Guillermo (del Dúo Resolana) y Walter, de la comunidad local.

Más tarde, el Dúo Resolana nos deleitó con varias canciones

como ésta, "Balada de Otoño". El Dúo Resolana ya es un amigo nuestro que nos ha acompañado en varios eventos, y eso es muy lindo, ya que la amistad es un regalo de Dios y un motivo de agradecimieto, el tema de nuestro Té.

 Entre número y número, hubo varios sorteos: dos libros, 7 centros de mesa hechos de plantines y una sesión de masajes.

 La gran ganadora de la tarde fue María Esther y su grupo, que vinieron de la comunidad de Patagones para acompañar a Bahía Blanca en su primer Té con tortas.

 También nos acompañó Rodolfo Behrens, un integrantes de los Poetas de la Bahía, autor e intérprete de canciones del folklore sureño.

 Una vez que finalizaron sus presentaciones, se les dio un certificado de participación de nuestra actividad como un agradecimiento, aparte de una bandeja de tortas a elección. El la foto aparecen en orden de izquierda a derecha: Rodolfo, Guillermo, Marita y Estela, la Pastora de la Congregación.

 En la mañana del domingo, 2 de Junio, a las 10 hs., celebramos nuestro Culto de Acción de Gracias.

 Reflexionamos acerca de la importancia del cuerpo como una unidad interconectada, como las uvas de un racimo.

 Hablamos de los dones que Dios nos ha dado como aquello con lo que cada uno puede aportar para el crecimiento del Reino y la proclamación del mensaje de Jesús. Cada persona pasó para agregarle las uvas al racimo que comenzó a formarse en Patagones.

 Realmente hay mucho que agradecer a Dios... nuestro trabajo, nuestra familia, nuestros amigos, nuestras vidas... La tarde anterior sentimos su presencia en la comunión y el espíritu que vivimos en el Té organizado con tanto amor y al que se sintieron convocadas varias personas... ¡eso también es un motivo para agradecer a Dios!

Dios nos da tanto... ¿cómo no devolverle al menos un poco de lo mucho que nos da?
Todavía nos quedan dos cultos de Acción de Gracias en la Congregación, todavía podemos seguir reflexionando sobre esto y agradecer infinitamente a Dios.

Estela Andersen