miércoles, 17 de junio de 2009

¿QUÉ ES LO QUE TENEMOS QUE AGRADECERLE A DIOS?

“Si apartas de ti todo yugo,
no apuntas con el dedo y no hablas maldad,
repartes tu pan al hambriento,
y al alma afligida dejas satisfecha,
resplandecerá tu luz en las tinieblas,
y lo oscuro de ti será como mediodía.
Dios te guiará continuamente,
te hartará en los campos secos,
dará vigor a tu huesos,
y serás como huerto regado,
o como manantial
cuyas aguas nunca faltan.”
(Isaías 58:9b-11)


Desde el mismo momento en que el ser humano obtuvo un resultado del esfuerzo del trabajo, sintió la necesidad de ofrecerle a Dios los primeros frutos. Dice el libro del Génesis, capítulo 4, que tanto Caín como Abel le ofrecieron a Dios, las primicias de su producción: Caín su cosecha y Abel, un cordero. Ambos tenían la certeza de que lo que la tierra les había dado venía de Dios y su bendición.
A lo largo del Antiguo Testamento vemos muchos escritos que hablan acerca de nuestra obligación de darle gracias a Dios por todo lo que nos da, incluso podemos encontrar algunos escritos en donde habla acerca del enojo que provoca en Dios esta falta de reconocimiento por parte de su pueblo.
Jesús no entra en ese tema: aborrece otra ley que no sea la del amor, por eso no sale de su boca nada que sea obligatorio: Él exige conversión y todo lo que hagamos, debe salir del corazón. Por eso es que los cristianos no tenemos leyes religiosas que nos obliguen a esto o aquello. Jesús murió por cada uno de nosotros para liberarnos, para llevar sobre sus espaldas todo aquello que signifique un obstáculo en nuestra relación con Dios.
¿Eso significa que ya no necesitamos siquiera agradecer? No, de ninguna manera. Dios nos ha dado mucho durante nuestras vidas, y lo sigue haciendo. Seguramente también se preguntarán en estos tiempos tan difíciles en donde se juntan una gran crisis económica y una sequía terrible, nunca vista (al menos por nosotros): ¿qué lo que tenemos que agradecerle a Dios?
Los invito a observar sus vidas, la gente que los rodea, que los ama… Los invito a mirar sus vidas como un largo camino… ¿qué ven allí? ¿hay algo por lo cual agradecer a Dios?...
¡Claro que sí! ¡Hay mucho que agradecerle y vale la pena hacerlo! Los invito a acercarse a la iglesia con su herramienta de trabajo más apreciada y agradecerle a Dios porque nos ha dado manos y creatividad para poder dar de comer a nuestras familias, y por supuesto, a pedirle que nos siga bendiciendo, ¡que falta nos hace!
El profeta Isaías nos dice que si buscamos un camino en el Señor y siempre, aunque con lo poco que tenemos, ayudamos a los demás, nunca nos va a faltar lo que necesitamos. Vale la pena tener en cuenta sus palabras y descubrir así que Dios nunca nos abandona. ¡Que Dios los bendiga!

Estela Andersen

CULTO DE ACCIÓN DE GRACIAS
Bahía Blanca 5 de Julio 10 hs.
Coronel Suárez 14 de Junio 10 hs.
Alpachiri 19 de Julio 10 hs.
San Martín 19 de Julio 16 hs.
Carmen de Patagones 26 de Julio 10 hs.
Ströeder 26 de Julio 16 hs.

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